domingo, 14 de junio de 2015

Nutella Cookies


El otro día, cuando publiqué el post de masa de cookies, muchas de vosotras me preguntasteis por alguna receta para hacer la masa. Hace un tiempo una vecina me pasó esta receta que la hace con sus nietas y me dijo que era muy fácil de hacer. Las que alguna vez habéis hecho cookies os preguntareis que es raro que no lleve azúcar moreno, ni bicarbonato, ni mantequilla... pero la cuestión es que no lo lleva así que os animo a probarlas con los mas peques de la casa porque salen buenísimas...

INGREDIENTEs: (Para aprox. 20 galletas)


  • 1 huevo grande, 100 gr. azúcar, 140 gr. harina trigo todo uso, 250 gr. Nutella




Preparación
  • Precalentar el horno a 175º
  • Preparar una bandeja de hornear galletas con un papel de hornear o lámina de silicona.
  • Batir el azúcar y el huevo.
  • Añadir la harina de golpe hasta que quede una mezcla grumosa. No importa que queden restos de harina.

  • Incorporar la Nutella y batir hasta que obtengamos una mezcla grumosa.

  • Hacer bolitas de aproximadamente 2,5 cm. de diámetro y colocarlas en la bandeja con una separación de unos 5 cm. entre una u otra.
  • Aplastar con el culo de un vaso. Si las queremos crujientes aplastar mucho, si las queremos blanditas y “chiclosas” aplastar solo ligeramente.

  
  • Hornear  durante unos 7 – 8 minutos.
  • Dejar enfriar en la bandeja sobre la rejilla.



viernes, 12 de junio de 2015

Acidez o agruras durante el embarazo




Estoy embarazada y siento quemazón en la boca del estómago después de comer, ¿es acidez?


Muy probablemente. Muchas mujeres sufren de acidez (agruras) por primera vez durante el embarazo y, si bien es común y generalmente inofensivo, puede resultar bastante molesto. 

La acidez (también conocida como hiperclorhidria o reflujo ácido) es una sensación de quemazón que a menudo se extiende desde la parte de abajo del esternón hasta la zona inferior de la garganta. Es consecuencia de los cambios hormonales y físicos que se producen en tu cuerpo. 

Durante el embarazo, la placenta produce la hormona progesterona, que relaja los músculos lisos del útero. Esta hormona también relaja la válvula que separa el esófago (parte del tubo digestivo que une el estómago con la faringe) del estómago, de modo que los ácidos gástricos regresan desde estómago hacia el esófago, y esto produce la sensación de acidez. 

La progesterona también disminuye las contracciones peristálticas del esófago y los intestinos, haciendo que la digestión sea lenta. Además, a medida que avanza el embarazo, tu bebé — que cada vez está más grande — presiona sobre tu estómago, desplazando los ácidos estomacales hacia el esófago. 

Muchas mujeres comienzan a tener acidez y otros malestares gastrointestinales durante la segunda mitad del embarazo. Desafortunadamente, en la mayoría de los casos esto persiste hasta que nace el bebé. 


¿Qué puedo hacer?

Si bien es posible que no puedas eliminar totalmente la acidez, puedes tomar algunas medidas para reducir el malestar:

  • Evita comidas y bebidas que te produzcan malestar gastrointestinal. Los sospechosos de siempre son las bebidas con gas; el alcohol (que de todas formas debes evitar durante el embarazo); la cafeína; el chocolate; los alimentos ácidos como los cítricos y jugos, el tomate, la mostaza y el vinagre; las carnes procesadas; los productos con menta; y los alimentos picosos, muy condimentados, fritos o grasosos.

  • En lugar de ingerir comidas abundantes, come pequeñas cantidades varias veces al día. Come despacio y mastica mucho la comida.

  • Evita tomar grandes cantidades de líquido durante las comidas para que no se te hinche el estómago. (Es importante que tomes de ocho a diez vasos de agua diarios durante el embarazo, pero hazlo entre las comidas.)

  • Intenta masticar chicle después de las comidas. Masticar chicle estimula las glándulas salivales y la saliva ayuda a neutralizar el ácido.

  • No comas cuando estés por irte a la cama. Deja dos o tres horas para hacer la digestión antes de acostarte.

  • Duerme recostada sobre varias almohadas o usa un almohadón en forma de cuña. Al elevar la parte superior del cuerpo, ayudarás a que los ácidos estomacales permanezcan en su lugar y conseguirás que la digestión sea más fácil.

  • Aumenta una cantidad prudente de peso y consérvate dentro de los parámetros que te sugiera tu doctor.

  • Usa ropa holgada y cómoda. Evita usar prendas que te aprieten alrededor de la cintura y el vientre.

  • Flexiona las rodillas en lugar de doblar la cintura cuando tengas que recoger algo del suelo.

  • No fumes. Además de contribuir a una gran cantidad de problemas de salud, fumar aumenta la acidez estomacal. (Lo ideal es que dejes el hábito de fumar antes de quedar embarazada. Si todavía fumas y te resulta difícil dejar el cigarrillo, lee nuestro artículo sobre cómo dejar de fumar.

  • Un antiácido de venta sin receta médica que contenga magnesio o calcio te puede ayudar a aliviar el malestar, pero antes de tomarlo consulta al médico que está atendiendo tu embarazo, dado que algunas marcas tienen aluminio, aspirina, o un alto contenido de sodio.


En caso de que ninguna de las sugerencias anteriores te alivie, debes consultar con tu doctor. Hay medicamentos con receta que te pueden ayudar también. 

miércoles, 10 de junio de 2015

36 semanas de embarazo: Llegando al último mes

Mi bebé…


¡Tu bebé sigue aumentando de peso! Cada día aumenta casi 30 gramos. Ahora pesa alrededor de 2,7 kilos. Mide un poco menos de 47,5 centímetros.


Está perdiendo poco a poco el vellito que lo cubría durante las semanas anteriores, así como la sustancia cremosa (vernix caseosa) que ha recubierto su piel durante todo el tiempo que ha estado flotando en el líquido amniótico. Junto con el líquido amniótico que traga, el bebé también traga la vernix caseosa y el vello que pierde, además de otras secreciones. Toda esa mezcla, que tiene un color negro o verde muy oscuro y se llama meconio, formará su primera evacuación. Por eso, ¡no te asustes cuando le cambies los primeros pañales y los encuentres todos negros!

Al final de esta semana, el bebé habrá llegado a término. Los bebés que nacen antes de las 37 semanas se consideran prematuros y los que nacen entre las 37 y las 42 semanas, a término. Lo más probable es que esté ya situado en posición para nacer, con la cabecita hacia abajo. Si para la semana que viene no se ha puesto en posición, es posible que tu doctor sugiera una "versión cefálica exterior" que es una forma de decir en lenguaje médico, que el doctor tratará de girar a tu bebé para que se ponga en la posición ideal para el nacimiento, empujándolo con una mano desde la parte exterior de tu vientre.




Mamá…


Ahora que el bebé continúa creciendo y presionando tus órganos internos, podrías sentir que ya no tienes tanta hambre como tenías hace unas semanas. En este periodo te resultará más fácil digerir comidas pequeñas y frecuentes. Si el bebé empieza a encajarse en la pelvis, puede que tengas menos acidez y menos sensación de ahogo. Este descenso del bebé en la pelvis se llama encajamiento y lo más común es que ocurra antes del parto, si éste es tu primer bebé. El encajamiento puede incrementar la presión en la parte baja del vientre y hacer que caminar te resulte incómodo. Algunas mujeres dicen que sienten como si llevaran una bola de jugar a los bolos entre las piernas, o como si el bebé se fuera a salir.


¿Estás despistada? 

Olvidarte de las cosas es normal durante el último trimestre. Puedes sentirte abrumada o simplemente distraída por los grandes cambios que está a punto de experimentar tu vida, además de cansada, si no puedes dormir bien por las noches. También es posible que sientas que las contracciones de Braxton Hicks son ahora un poco más frecuentes. Éste es un buen momento para revisar con tu médico exactamente cómo y a dónde lo tienes que llamar, cuando creas que tu parto ha empezado. Por regla general, debes llamarlo si tienes contracciones regulares cada cinco minutos, durante una hora. Si tienes señales de parto esta semana, llámalo de inmediato, porque el bebé se considera prematuro hasta la semana 37. También debes llamarlo enseguida si rompes aguas (rompes la fuente o bolsa), si piensas que te está goteando un poco de líquido amniótico, si notas que el bebé ya no está tan activo o si tienes hemorragia vaginal, fiebre, dolores de cabeza muy fuertes, dolor abdominal o cambios en la visión.

Esta semana

Ayer tuve visita con la ginecóloga para hacerme una eco y mirar si la niña sigue sentada. Y así es. De momento no hay manera de que se de la vuelta. Si la semana sigue igual miraremos de hacer una versión externa. Me han comentado que al ser el tercer parto es normal que la niña hasta las últimas semanas, incluso hasta el mismo día de parto no se dé la vuelta así que tendremos que esperar a ver que decide hacer. 

Por lo que hace el tema de la dieta que me pusieron sigo con ella, sin comer harinas, pasta, azúcar… De momento ya noto que me he deshinchado en el poco tiempo que llevo haciéndola. La semana pasada que tuve matrona me dieron las citas que me quedan entre ellas una que me llamó la atención que es sobre educación nutricional… En ella me enseñaran lo que debo comer y como pincharme para controlar el azúcar… Hasta aquí perfecto pero la hora me la han dado para 29 de junio que me va a quedar una semana para parir así que no entiendo muy bien que va a caviar en una semana el comer lo que me digan. También me programaron las correas, y varias visitas con la ginecóloga para ir controlando a la peque si se gira o no.


domingo, 7 de junio de 2015

Corazón de huevo


Ya se que el título de este post es algo raro pero no veía mejor otro nombre para este descubrimiento que hice por internet. Una manera diferente de presentar unos simples huevos cocidos. 

Solo necesitamos:


- Un palito


- Una hoja de cartulina

- Dos gomitas

- Un huevo cocido

El tutorial nos explica claramente como conseguirlo casi sin 

esfuerzo!!



A que queda curioso?? 

viernes, 5 de junio de 2015

Prueba del estreptococo del grupo B


¿Qué es el estreptococo del grupo B?


El estreptococo del grupo B es un tipo de bacteria que mucha gente tiene en el tracto intestinal. La bacteria también puede estar en o "colonizar" tu vagina, desde donde puede infectar a tu bebé durante el parto



Aproximadamente entre el 10 y el 30 por ciento de las mujeres embarazadas son portadoras de la bacteria en la vagina o el recto y el área circundante. Por lo general el estreptococo del grupo B es inofensivo en los adultos sanos, pero puede causar un bebé mortinato (que nace muerto)o infecciones serias en los bebés. 

Ten en cuenta que aunque el estreptococo del grupo B puede transmitirse a través de una relación sexual, no se considera una infección de transmisión sexual porque tu área genital puede infectarse a partir de bacterias que viven en tu propio tracto gastrointestinal. Tampoco es lo mismo que la infección de garganta por estreptococo, causada por el estreptococo del grupo A. 


¿Por qué debo hacerme una prueba del estreptococo del grupo B?


Hacerte una prueba del estreptococo del grupo B a finales del embarazo (y recibir tratamiento con antibióticos durante el parto si eres portadora de la bacteria) reducirá enormemente el riesgo de que tu bebé se infecte. 



Por este motivo, los ginecólogos recomiendan que todas las mujeres embarazadas —con dos excepciones— se hagan una prueba rutinaria de estreptococo del grupo B entre las semanas 35 y 37. 

Las dos excepciones son: mujeres que han tenido un hijo con una infección producida por el estreptococo del grupo B y mujeres a quienes se les detecta el estreptococo del grupo B en la orina durante el embarazo. Estas mujeres no necesitan hacerse el estudio, porque ya se sabe que el riesgo es alto y se las tratará automáticamente durante el parto. 

Antes de que se les hiciera rutinariamente la prueba a todas las mujeres embarazadas y se aplicara el tratamiento en caso necesario, aproximadamente entre 2 y 3 bebés cada 1.000 nacimientos sufrían lo que se denomina estreptococo del grupo B de aparición temprana. Esta enfermedad aparece en la primera semana de vida (con más frecuencia en las primeras 24 horas después del nacimiento), y puede ser mortal. Ahora hay alrededor de 0.35 casos cada 1.000 nacimientos. 


¿Cuáles son las consecuencias del estreptococo del grupo B de aparición temprana?

El estreptococo del grupo B de aparición temprana puede causar septicemia (una infección en la sangre), neumonía y meningitis en los recién nacidos. Algunos de estos bebés, especialmente aquellos que contraen meningitis, tendrán problemas de salud a largo plazo, tales como pérdida de la audición o la visión, parálisis cerebral o discapacidades en el desarrollo, y alrededor del 5 por ciento no sobrevivirá. 



Los bebés prematuros tienen un índice de supervivencia menor que los bebés que nacen a término, y aquellos que sobreviven tienen mayor riesgo de padecer problemas a largo plazo a causa de la enfermedad. 


¿Por qué no me hacen la prueba en la primera visita prenatal y me tratan inmediatamente si sale positiva?

El estudio no se realiza hasta que el embarazo está avanzado porque la bacteria del estreptococo del grupo B puede aparecer y desaparecer. El resultado de un cultivo vaginal o rectal temprano no puede predecir si la bacteria estará presente en el área genital cuando des a luz. Puede que des un resultado negativo en un momento dado y positivo en el momento del parto o viceversa. Por este mismo motivo te tienen que hacer la prueba durante cada embarazo. 



Asimismo, el recibir antibióticos antes del parto, no te garantiza que la bacteria ya no "colonizará" nuevamente el área genital; por lo tanto, el riesgo de que la infección se transmita a tu bebé no disminuye (a diferencia del tratamiento que se usa durante el parto). 

Sin embargo, si tienes una infección urinaria durante el embarazo, causada por el estreptococo del grupo B, te recetarán inmediatamente antibióticos orales y te harán un segundo cultivo vaginal al finalizar el tratamiento para asegurarse que ya no tienes infección. 

Aunque los antibióticos orales se encargarán de acabar con la bacteria en tu tracto urinario, es probable que queden residuos de la bacteria en el área genital. También es posible que la bacteria invada el área genital más tarde. El que tu orina contenga estreptococo del grupo B es una señal de que tienes una cantidad significativa de esa bacteria en tu área genital. Si éste es tu caso, como se señaló anteriormente, te darán antibióticos por vía intravenosa automáticamente durante el parto. 


¿En qué consiste la prueba del estreptococo del grupo B?

Tu médico tomará muestras de células de la parte inferior de tu vagina y recto (esto no será doloroso) y las enviará a un laboratorio. Allí las harán crecer en un cultivo que permitirá identificar si la bacteria del estreptococo del grupo B está presente. Los resultados estarán disponibles en dos o tres días, y el médico te los entregará en la próxima consulta prenatal. Si se olvida, pídeselos tú. (Es bueno conocer los resultados, en caso de que por algún motivo tu historia clínica prenatal no esté disponible cuando vayas a dar a luz). 



Quizás habrás oído hablar de una prueba del estreptococo del grupo B, que se puede hacer durante el mismo parto en el hospital y da el resultado en una hora aproximadamente. Ten en cuenta que esas pruebas rápidas no son tan precisas como las pruebas de cultivo. Hasta el momento, el CDC, el ACOG y la AAP recomiendan hacer la prueba basada en un cultivo entre las semanas 35 y 37 del embarazo. 


¿Qué sucederá si el resultado de la prueba da positivo?

Si el resultado da positivo simplemente significa que eres portadora de la bacteria y no que tú o tu bebé se enfermarán, incluso si no recibes el tratamiento adecuado. Sin embargo, recibir antibióticos durante el parto reduce el riesgo de infección en tu bebé enormemente. 



Por ejemplo, si el resultado da positivo y no tienes otros factores de riesgo (has llegado a la semana 37 del embarazo, no tienes fiebre, y tu fuente no lleva mucho tiempo rota), la probabilidad que tendría tu bebé de enfermarse sería de 1 ó 2 en 200 sin tratamiento y de 1 en 4.000 con tratamiento. 

El tratamiento también reduce tus posibilidades de desarrollar una infección de estreptococo del grupo B (como una infección uterina) durante o después del parto, lo cual a veces sucede. 

Si la prueba da un resultado positivo empezarás a tomar antibióticos tan pronto empiece tu parto o cuando se te rompa la fuente, lo que sea primero. El único caso en el que no necesitarás antibióticos es si te hacen una cesárea programada, que se realiza antes de que se te rompa la fuente o comience el parto, sin importar cuánto tienes de embarazo 

Lo ideal sería que empezaras a tomar antibióticos al menos cuatro horas antes de dar a luz, pero si el parto es muy rápido, quizás no tengas tanto tiempo. Sin embargo, si empiezas incluso un par de horas antes del parto, el riesgo para el bebé se reducirá de manera significativa. 

Y trata de no preocuparte, ya que las posibilidades de que el bebé se enferme son escasas, especialmente si nació a término, si tú no tienes fiebre, y si tu bolsa no estuvo rota durante mucho tiempo. 


¿Qué sucederá si empieza el parto y los resultados aún no están disponibles?


  • Si cuando comienza el parto no se sabe si eres portadora de la bacteria te tratarán con antibióticos si existe uno de los siguientes factores de riesgo: 

  • Si comienzas el parto prematuramente o tu fuente se rompe antes de la semana 37.
  • Si pasa mucho tiempo (18 horas o más) entre la ruptura de la fuente y el parto.
  • Si tienes fiebre durante el parto 

Si en la clínica que das a luz están disponibles las pruebas rápidas del estreptococo del grupo B y no tienes ninguno de los factores de riesgo arriba mencionados, tu doctor podría optar por hacerte el examen y darte un tratamiento si los resultados son positivos. Si tu análisis da negativo, pero desarrollas algunos de los factores de riesgo, te darán un tratamiento en ese momento, ya que como se mencionó anteriormente, algunas de esas pruebas rápidas pueden fallar. 



¿Cuáles son los riesgos de tomar antibióticos durante el parto?

Probablemente te administren penicilina, que se sabe que es segura para el bebé. El 10 por ciento de las mujeres embarazadas que reciben penicilina desarrollan leves síntomas alérgicos, como por ejemplo, sarpullido. En casos muy poco frecuentes, la penicilina causa una reacción alérgica grave que requiere un tratamiento de emergencia (1 de cada 10.000 casos) y puede llegar a ser incluso potencialmente mortal (1 de cada 100.000 casos). 



Si has tenido una reacción alérgica a la penicilina anteriormente, tu médico solicitará al laboratorio que analice tu cultivo para ver qué otros antibióticos son adecuados para atacar el estreptococo del grupo B. Si no estás segura de si eres alérgica a la penicilina, pueden realizarte una prueba cutánea para ver si puedes utilizar este medicamento sin riesgos. 


¿Qué tipo de seguimiento se hace una vez que nace el bebé?

Tanto si te han tratado con antibióticos durante el parto como si no, si eres portadora de estreptococo del grupo B, el equipo médico de tu bebé lo observará detenidamente en busca de signos de infección. 



Los estudios muestran que, el 90 por ciento de los bebés que se contagian de la enfermedad por estreptococo del grupo B de aparición temprana comienzan a mostrar signos de la infección durante las primeras 24 horas de vida. 

Estos signos incluyen: 

  • Respiración dificultosa.
  • Irritabilidad poco común.
  • Flaccidez excesiva o rigidez extrema.
  • Problemas de alimentación.
  • Aletargamiento (un bebé al que le cuesta despertar).
  • Convulsiones.
  • Temperatura inestable.



Si tu bebé está internado en la misma habitación que tú o ya están en casa, y notas cualquiera de estos problemas, busca ayuda de inmediato. 

Si el equipo médico sospecha que el bebé puede estar infectado, le administrarán antibióticos de inmediato y le realizarán una revisión completa, que incluirá un análisis de sangre y, según las circunstancias, una radiografía de tórax y una punción lumbar. Si el bebé no presenta signos de infección, podrás llevártelo a casa después de uno o dos días. 

Si quieres irte a casa antes, es probable que el doctor de tu bebé acepte darlo de alta en 24 horas, siempre y cuando cumplas con lo siguiente: 


  • Te administraron antibióticos por lo menos cuatro horas antes de dar a luz. FNo había señales de infección durante el parto.
  • Tu bebé nació a término, es sano y no tiene otras complicaciones médicas.
  • Entiendes perfectamente las instrucciones que te dio tu doctor sobre los signos de infección que debes observar en tu bebé.
  • Puedes tener acceso médico de inmediato.

Si no cumples con esos requisitos,tu bebé necesitará permanecer en observación en el hospital por lo menos 48 horas. 


Si el bebé fue prematuro, probablemente se le realicen algunas pruebas y necesite permanecer más tiempo, incluso si no presenta signos de infección. Esto se debe a que los bebés prematuros tienen más probabilidades de contagiarse de la enfermedad producida por el estreptococo del grupo B y de que la enfermedad sea más grave. 

¿Puede mi bebé infectarse después de nacer?

Es posible que un bebé desarrolle la infección del estreptococo del grupo B después de la primera semana de nacido (usualmente, en los primeros tres meses). Esta aparición tardía afecta a alrededor de la mitad de todos los recién nacidos que padecen de la enfermedad producida por el estreptococo del grupo B. Esta aparición tardía tiene los mismos efectos que la aparición temprana de la enfermedad y afecta a casi a la misma cantidad de bebés, 0.3 de cada 1.000 casos. 



Seas o no portadora, si tu bebé parece enfermo o no se ve bien, busca ayuda de inmediato.Llama al doctor si tu bebé muestra los siguientes signos: está letárgico, irritable o bien, tiene una disminución de apetito, dificultad para alimentarse, vómitos y fiebre. 


¿Se puede prevenir la aparición tardía de estreptococo del grupo B?

El recibir antibióticos durante el parto no previene la aparición tardía de esta enfermedad. De hecho, sólo la mitad de los bebés que se contagian de forma tardía tienen madres portadoras del estreptococo del grupo B; nadie sabe cómo el resto se contagia de la bacteria. 



Los investigadores están trabajando en una vacuna contra el estreptococo del grupo B que esperan elimine la enfermedad de aparición temprana y también la de aparición tardía, junto con la necesidad de pruebas y tratamiento. También podrá prevenir los casos poco comunes de partos de bebés que nacen sin vida y nacimientos prematuros relacionados con el estreptococo del grupo B. 

miércoles, 3 de junio de 2015

35 semanas de embarazo: prueba del estreptococo del grupo B

Mi bebé...

¡Tu bebito se está poniendo grande! Ya pesa unos 2,3 kilos, como un paquete grande de azúcar, y mide más de 46 centímetros desde la cabeza hasta los talones.



Está ya un poco apretado en el útero. No te sorprendas si de repente ves un pie o un codo empujando la piel de tu abdomen. Ya no flota como antes y no da los saltos que daba, pero que tenga menos espacio no significa que se mueva menos: tu bebé debe seguir dando pataditas con la misma frecuencia que lo hacía antes. Si notas que se mueve menos, debes llamar a tu doctor.

Sus riñones están ahora completamente desarrollados y el hígado también está comenzando a funcionar. La mayoría de su desarrollo físico básico está ya completo. En las próximas semanas se dedicará a aumentar de peso.




Mamá...

A medida que te acercas a la fecha del parto, el cartílago blando de tu pelvis empieza a expandirse para que el bebé pueda pasar por el canal vaginal más fácilmente. Esta expansión hace que las mujeres embarazadas caminen balanceándose. El encajamiento, que es cuando tu bebé desciende hacia la parte más baja de la pelvis antes de nacer, también puede hacer que camines balanceándote. Algunas mujeres sienten que el bebé ha descendido y se ha encajado en su pelvis semanas antes del parto.

Tu útero, que ahora ya te llega hasta debajo de las costillas, ha aumentado unas 15 veces desde su tamaño original. Quizás sientas que ya no te queda espacio para acomodarlo. Si pudieras mirar adentro, verías que ya queda menos líquido amniótico, y que tu bebé está muy grande. El útero también está presionando sobre los órganos internos, y por eso tienes que ir tantas veces al cuarto de baño y sufres de acidez y otros problemas digestivos. ¡Si no tienes esos problemas, eres una de las pocas mujeres con esa suerte!

Probablemente tu doctor quiera verte ahora cada semana y te pida que cuentes los movimientos del bebé para poder controlar su nivel de actividad. Entre ahora y la semana 37 de embarazo, hará una prueba para comprobar las bacterias que hay en la vagina y descartar que esté presente el estreptococo del grupo B. El cultivo se hace pasando un palito, parecido a los que se usan para los oídos, pero más largo, por la vagina y el recto. Esta prueba no es dolorosa.

El estreptococo del grupo B generalmente no causa daños en los adultos, pero si lo tienes y se lo contagias al bebé durante el parto, puede causarle complicaciones (como neumonía,meningitis o una infección en la sangre). Debido a que entre el 10 y el 30 por ciento de las mujeres embarazadas tienen la bacteria, y no lo saben, es importante hacerse esta prueba. Las bacterias aparecen y desaparecen por sí solas, por eso es que no te hacen la prueba antes). Si tienes la bacteria, te darán antibióticos intravenosos durante el parto, lo cual reducirá el riesgo de infectar al bebé en un 70 por ciento.

Esta semana...

Desde que dejé de trabajar la semana pasada he notado mejor circulación en las piernas. Mañana tengo el cultivo con el ginecólogo y me programará las últimas visitas hasta el día del parto. De momento la niña sigue haciendo de las suyas. Este fin de semana se dio la vuelta pero el lunes se volvio a sentar... Espero que con los días se ponga boca abajo y deje de hacer acrobácias.


domingo, 31 de mayo de 2015

Cookies JUS ROL


Si hace unos días os hablaba de las tartaletas hoy os quiero hablar de las cookies. Ayer vi de la misma marca de la masa de las tartaletas, Jus Rol, el paquete para hacer cookies. Es muy fácil de hacer y salen buenísimas!!!

La masa viene en forma rectangular ya preparada. Primero de todo se tiene que dividir en 8 trozos (que serán las 8 cookies). Después cogemos los trozos y hacemos bolas.


Cogemos las bolitas y las vamos chafando formando las cookies. Las colocamos en el papel para horno. Como no tenia unté la bandeja del horno con mantequilla y espolvoreé harina por encima. Tenemos que dejar unos 4cm entre una y otra. Yo las puse demasiado juntas porque no me cabían todas y se me juntaron unas con otras. 


Las ponemos en el horno precalentado a 180º 10-14 min. Sabremos que están  listas porque tienen que quedar doraditas. 


Las retiramos y las dejamos enfriar 5 min y ya las podemos comer.

Están buenísimas ya que las pepitas de chocolate quedan derretidas. 


Que gran descubrimiento la marca Jus Rol!!! ya os iré enseñando las demás masas.

viernes, 29 de mayo de 2015

Mareos y desmayos en el embarazo


¿Es normal sentirte mareada durante el embarazo?



Sí. No es raro que te sientas mareada o aturdida de vez en cuando. Cuando estás embarazada, tu sistema cardiovascular está sujeto a cambios drásticos: aumentan las pulsaciones, tu corazón bombea más sangre por minuto y la cantidad de sangre de tu cuerpo aumenta de un 40 a un 45 por ciento. 

En un embarazo normal, tus vasos sanguíneos se dilatan y tu presión arterial disminuye de manera gradual y alcanza su punto más bajo en la mitad del embarazo. Después comienza a aumentar y regresa a su nivel normal cuando el embarazo llega a su etapa final. 

La mayor parte del tiempo, los sistemas cardiovascular y nervioso logran adaptarse a todos estos cambios y hay una cantidad adecuada de sangre circulando en tu cerebro. Sin embargo, existen ocasiones en que dichos sistemas no se adaptan lo suficientemente rápido y cuando eso sucede, puedes sentirte mareada, un poco aturdida o incluso desmayarte.

¿Qué puedo hacer si me mareo?



Recuéstate en cuanto te sientas mareada o aturdida, para que no te caigas ni te lastimes en caso de que te desmayes. Si estás en un lugar donde no puedes recostarte, siéntate y trata de colocar la cabeza entre las rodillas. Y, por supuesto, si estás haciendo alguna cosa que pudiese ponerte a ti o a otros en peligro, como por ejemplo, manejar el auto, detente inmediatamente. 

Si te acuestas del lado izquierdo, aumentará el flujo de sangre hacia el corazón y en consecuencia, hacia el cerebro. Seguramente esto impedirá que te desmayes y es posible que también reduzca la sensación de mareo. 

A continuación incluimos algunas de las causas más comunes de mareos durante el embarazo y algunos consejos sobre cómo puedes evitarlas:

Pararte demasiado rápido

Cuando te sientas, la sangre se acumula en los pies y la parte inferior de las piernas. Si tu cuerpo no logra adaptarse cuando te paras, es porque no regresa suficiente sangre desde las piernas al corazón. Como resultado, la tensión arterial baja rápidamente y puede ocurrir que te desmayes. 


Para evitar marearte, trata de no levantarte abruptamente de la silla o de la cama. Cuando estás acostada, levántate despacio y permanece sentada unos minutos con las piernas colgando del costado de la cama o del sofá. Luego incorpórate despacio desde la posición de sentada, hasta pararte. 

La sangre también se acumula en los pies y las piernas cuando permaneces de pie en un lugar durante mucho tiempo. Si estás en una situación en la que no te puedes mover mucho, trata de mover las piernas para estimular la circulación. Usar medias de soporte también te puede ayudar a mejorar la circulación en la mitad inferior de tu cuerpo.

Acostarte sobre la espalda. 

En el segundo y tercer trimestres de embarazo, el útero en crecimiento puede hacer más lenta la circulación en las piernas al comprimir la vena cava inferior (la vena grande que regresa la sangre desde la mitad inferior de tu cuerpo al corazón) y las venas de la pelvis. 

Acostarte sobre la espalda puede empeorar este problema. De hecho, alrededor del 8 por ciento de las mujeres embarazadas desarrollan en su segundo y tercer trimestres una condición denominada síndrome hipotensivo en decúbito supino que consiste en que al acostarse sobre la espalda, se incrementan las pulsaciones, baja la tensión arterial y como consecuencia, la afectada se siente ansiosa, mareada y con náuseas hasta que cambia de posición. 

Para evitar este problema, acuéstate de costado en lugar de hacerlo sobre la espalda. Cualquiera de los lados es mejor que la espalda, aunque el lado izquierdo es mejor. Colocarte una almohada por detrás o bajo la cadera, puede ayudarte a permanecer de costado o, al menos, lo suficientemente inclinada como para impedir que el útero comprima la vena cava.

  • No ingerir suficiente comida y bebida. 

  • Si no comes lo suficiente, es posible que te baje el nivel de azúcar en la sangre (hipoglucemia), lo cual puede provocarte mareos o desmayos. Esto puede ocurrir con mucha más facilidad cuando estás embarazada. 

Trata de evitar que te baje demasiado el nivel de azúcar de la sangre y para eso come poco, pero muchas veces al día en lugar de hacer tres comidas grandes. Lleva contigo refrigerios o botanitas saludables de modo que puedas comer cuando tengas hambre. Lee más sobre cómo llevar una alimentación sana durante el embarazo. 

La deshidratación te puede afectar de manera similar. Asegúrate de estar hidratada y para eso bebe de ocho a diez vasos de agua por día, y más si practicas ejercicios o si hace calor.

Anemia. 

  • Si te encuentras anémica, tienes menor cantidad de glóbulos rojos para transportar oxígeno a tu cerebro y a otros órganos, lo cual te puede ocasionar mareos. La falta de hierro es la causa más común de la anemia, así que asegúrate de llevar una alimentación rica en hierro y de tomar vitaminas prenatales con hierro, especialmente en el segundo y tercer trimestre. Si padeces de anemia, tu médico posiblemente te recete además un suplemento de hierro.

Sensación de excesivo calor. 

Permanecer en una habitación en donde haga mucho calor o tomar un baño o una ducha calientes puede hacer que los vasos sanguíneos se dilaten, y de esta manera baje tu tensión arterial y te sientas atontada. 

Si te mareas cuando hay demasiado calor, evita los lugares abarrotados de gente y con aire viciado y vístete con ropas cómodas que te puedas ir quitando a medida que lo necesites. Toma duchas o baños tibios en lugar de calientes, y trata de mantener fresco el cuarto de baño.

Hiperventilación. 

El ejercicio en exceso o la ansiedad pueden algunas veces provocar una respiración acelerada y profunda (hiperventilación) y producirte un desmayo. Aunque el ejercicio puede ayudar a mejorar la circulación, ten mucho cuidado de no realizarlo en exceso cuando estés cansada o no te sientas bien. Empieza despacio. Si comienzas a sentirte mareada o aturdida mientras haces ejercicio, para y recuéstate. 

Síncope vasovagal. 

Algunas personas se marean cuando hacen fuerza para toser, orinar o mover el vientre. Estas acciones pueden provocar una respuesta vasovagal (o sea, un efecto sobre el sistema circulatorio provocado por el nervio vago), es decir, una disminución de la tensión arterial y de las pulsaciones, que produce mareos y desmayos. (La palabra síncope significa desmayo). 

La deshidratación, la ansiedad y el dolor pueden también desencadenar esta clase de reacción, y las mujeres embarazadas son más vulnerables a padecerla. Los mareos y las señales de advertencia como la sensación de calor, la palidez, el sudor, las náuseas, los bostezos y la hiperventilación muchas veces preceden al síncope vasovagal. Presta atención a estas advertencias y recuéstate inmediatamente para intentar prevenir el desmayo.

¿Cuándo debería llamar a mi médico?


La sensación de mareo de vez en cuando por efecto del calor, del hambre o por ponerte de pie demasiado rápido, por lo general no es una señal de algo grave. Es muy probable que ya no tengas ese tipo de sensación cuando nazca tu bebé. Sin embargo, si las medidas sencillas que comentamos más arriba no te alivian el problema o si tienes algún tipo de inquietud, no dudes en pedir ayuda. 

Asimismo, no dudes en llamar a tu médico o partera si tienes mareos continuos o aturdimientos frecuentes, o si los mareos se producen como consecuencia de una herida reciente en la cabeza. 

Llama de inmediato al médico si el mareo viene acompañado de fuertes dolores de cabeza, visión borrosa, problemas en el habla, palpitaciones, pérdida de la sensibilidad, hormigueo, dificultad para respirar o hemorragia. Cualquiera de estos síntomas podría estar indicando la existencia de un problema más grave que podría afectarte tanto a ti como a tu bebé. 


miércoles, 27 de mayo de 2015

34 semanas de embarazo: bebé prematuro sin complicaciones

Mi bebé...

Tu bebito pesa un poco menos de 2 kilos y ya mide unos 46 centímetros desde la cabeza hasta los talones. Su sistema nervioso sigue madurando y tiene los pulmones ya desarrollados. Es una gran noticia, en caso de que decida que quiere nacer antes de tiempo. 

Si has estado nerviosa pensando en que quizás tengas un parto prematuro, te alegrará saber que los bebés que nacen entre las semanas 34 y 37, si no tienen otros problemas de salud, por lo general no tienen problemas graves. Quizás deban pasar un tiempo en la unidad de cuidado intensivo neonatal y tengan algunos problemas de salud a corto plazo, pero por lo general se recuperan y acaban tan sanitos como los bebés nacidos a término.





El hipo de tu bebé

Los científicos no conocen exactamente la causa del hipo en los adultos y tampoco saben explicar muy bien el hipo en el feto. El hipo de tu bebé — que es una contracción involuntaria del diafragma — es totalmente normal y no es un motivo de preocupación. Incluso puede ser motivo de alegría, porque el hipo solo ocurre cuando el sistema nervioso está totalmente desarrollado, a partir del segundo trimestre, y eso quiere decir que tu bebé se está desarrollando normalmente. Pero tampoco te preocupes si no sientes el hipo de tu bebé, porque algunas mamás lo sienten y otras no (el hipo se siente como una serie repetida de pequeñas sacudidas del bebé).

Mamá...

Puede que últimamente te sientas un poco cansada, y eso es algo perfectamente normal. ¡Imagínate todos los cambios por los que ha pasado tu cuerpo hasta ahora! Tómate las cosas con más tranquilidad porque tienes que ahorrar energía para el día del parto. Si tienes que pasar mucho tiempo parada, intenta llevar una faja o cinturón especial para el embarazo que te ayude a soportar el peso del vientre y lo distribuya mejor.

La mayoría del tiempo, tanto tu sistema nervioso como tu sistema cardiovascular se ajustan a los cambios que ocurren en tu cuerpo, pero a veces, no pueden y eso hace que te marees.El mareo o vértigo se puede dar debido a una variedad de causas, como por ejemplo, levantarse demasiado rápido, tener poco azúcar en la sangre, tener anemia severa o demasiado calor. Algunas mujeres encintas desarrollan una enfermedad que se llama "síndrome hipotensivo supino". El síndrome puede ocurrir cuando estás recostada sobre la espalda, porque esto hace que cambien el ritmo de tu corazón y tu presión sanguínea. Así que quizás te sentirás mareada hasta que cambies de posición.



También podrías notar algunos granitos rojos o ampollas en el vientre que causan comezón (éstos pueden aparecer también en los muslos y nalgas). Esta condición se llama pápulas y placas pruriginosas y urticariformes del embarazo (PUPPP, por sus siglas en inglés) y es generalmente inofensiva. 

Esta semana...

Ayer tube mi eco del tercer trimestre. En un principio todo parecia ser de lo mas normal. Digo normal en lo que se refiere comparando con los otros embarazos, pero no. Al entrar a la visita pregunté por los resultados de la prueva de la glucosa. Primero me dijeron que solo era una alteración, vamos lo de todos los embarazos, pero al hacerme la eco y ver que mi niña viene mas grande de lo normal me detectaron intolerancia a la glucosa. Al darme solo un valor alto tengo que seguir solo con la dieta sin medicación. La niña pesa 2.800kg es grande si pero lo que mas me preocupa es que encima está de culos. Bueno bien bien de culos no sino en forma de C.  En tres semanas hacerme otra eco para ver si se ha girado. Ya me han dicho que a medida que pasan los días es más dificil de que se gire por lo grande que es y porque cada vez tendrá menos espacio para hacerlo pero también que siendo el tercer embarazo es más fácil que pueda hacerlo hasta último momento.  Lo único que me da pánico de todo esto esque en el hospital donde doy a luz se ha puesto de moda tener a los niños de nalgas y la verdad no me parece que sea muy buena idea... Lo normal seria que si llegado el momento el bebé nos e ha girado pues que te hicieran cesária y listos y no pasar por todos los dolores del parto para nada, porque si está tan grande y en plan buda será por algo. No me apetece nada tener 20 puntos aqui abajo por gusto de las parteras. Tengo que dejar de trabajar ya que la presión de la niña podría provocarme un parto prematuro.